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lunes, octubre 16, 2006

Tibidabo

Esto es sobre el sábado 14 de octubre, cuando subí por primera vez al Monte Tibidabo, el más alto de los que rodean Barcelona.

Pero antes, un par de fotos de un atardecer desde la terraza:



Ahora sí. Bueno, la intención era levantarme el sábado bien temprano para ir a Tarragona, pero eso no fue posible, así que a las tres y media de la tarde bajé rumbo al metro sin saber bien adónde ir, pero con ganas de conocer alguna de las cosas que me faltan de Barcelona. Mirando el mapa de la ciudad, y calculando tiempos, decidí ir al monte Tibidabo, que ya ha aparecido en algunas de mis fotos (es ese monte con una catedral encima). Como he dicho antes, es el más alto de Barcelona, llega a los 588 metros sobre el nivel del mar (es bastante, teniendo en cuenta que está a sólo 10 kms. de la costa). Está ubicado al noroeste de la ciudad.

Había varias formas de acercarse. Elegí ir en tren hasta el Peu del Funicular y luego subirme al funicular que le da nombre al lugar (todo incluido en los 66 centavos del pasaje de metro). Un funicular es aquí un tren que sube por una vía recta, con una inclinación fija y elevada (alrededor de 30 grados), y que consiste en un único vagón que visto lateralmente es un rectángulo (para que el suelo del habitáculo esté horizontal) con un triángulo debajo (para que vaya apoyado sobre las vías). La otra forma de llegar, que es ir en tren hasta Avinguda Tibidabo (y probablemente pagar 2 euros para subir en un funicular "privado") quedará para la próxima.



Al salir me encontré en una especie de pueblito (Vallvidriera) ubicado a mitad de camino entre la base y la cima. Me llamó la atención la torre de telecomunicaciones de Barcelona, que mide casi 300 metros de altura (100 pisos), y que todavía hoy me pregunto cómo hicieron para construirla. De esta torre salen las señales de los (al menos) 10 canales de aire de la ciudad, las radios, etc., y todavía le sobra capacidad. El tercer piso contando desde arriba es un mirador, al que luego me subiría.


Al costado, unas escaleras descendían hasta donde llegaba la vista. Algún día las usaré... la verdad es que luego, cuando regresaba, pensé en bajar por ellas pero no tenía muchas ganas de perderme esta vez.


Los barcelonenses saben aprovechar la vista...



De pronto, se acabó la vereda, y no había a la vista ningún camino peatonal para subir el monte. Luego descubriría que simplemente no lo hay, está todo hecho para que subas en coche o uses otro funicular que, ese sí, te cuesta dos euros, y no sé dónde hay que tomarlo. Así que decidí subir caminando por el camino de montaña, yendo por el asfalto porque no había nada al costado. De todas maneras el tránsito no es para nada peligroso aquí.

Después de un rato llegué a un estacionamiento, y explorando descubrí que había un mirador en la torre, y que se podía subir. Decidí ignorar la advertencia de que el ascenso no era apto para personas que sintieran vértigo, pasé por el detector de metales (que, como siempre, sonó... al menos esta vez no era en el aeropuerto de Ezeiza...), y subí. El ascensor tiene tres paredes de cristal perfectamente limpio, y el mirador estará a unos 50 pisos de altura, pero igual no me dio vértigo para nada (tal vez me haya curado, después de la Sagrada Familia...). Aquí hay una foto, desde mitad de camino:


Este es el mirador por dentro:


Cada panel de vidrio tiene, arriba y abajo, el nombre de una ciudad que quede en esa dirección y la distancia. Así me enteré de que Nueva York está a 6178 kms., el polo norte a 5474, y de que Tarragona está a 98 kms. y en línea recta con Buenos Aires, que está un poquito más lejos:



Los vidrios estaban un poco sucios del lado de fuera (yo no los limpiaría, si me preguntan), así que estas fotos no son muy buenas. Además, había una bruma impresionante sobre toda la zona (y no es contaminación, era igual en todas direcciones). Aquí, una foto de la catedral:

Un par de fotos de Barcelona:


Y otra de la Catedral:


Salí, y mientras subía caminando en dirección a la Catedral, descubrí un camino que llevaba a Sant Cugat, un pueblo para gente con mucho dinero a unos 20 kms. de Barcelona. Hice algunos metros y saqué un par de fotos. En ellas se ve uno de los bosques que forman parte de la ciudad, en el cual, según los carteles, habría ciervos:



Y aquí se ve Barcelona, y en primer plano, el observatorio astronómico:


Muy bien, alrededor de la Catedral hay unas casas y un parque de diversiones. Una de las atracciones es este tren que juega un poco con el vértigo de la gente:


Barcelona, zona norte. Entre los tres manchones verdes vivo yo:


El parque de diversiones, visto desde fuera (sale bastante caro, me han dicho). No es nada del otro mundo, está orientado más a niños pequeños:


La Catedral, que en sí no debe ser muy antigua, ya que la parte más vieja está datada en 1886:




Foto desde el café de enfrente a la Catedral. No me queda claro por qué pero hay dos entradas, una inferior (visible en esta foto) y una superior (que permite acceder a la parte "blanca").

Esto es parte de lo que se ve ingresando por la parte inferior:



Vista de Barcelona, desde la terraza de la catedral:


Vista del interior de la parte "blanca", donde se estaba llevando a cabo una boda:


Desde allí, una foto a la torre de comunicaciones:


Y al café que está frente a la Catedral:


Y ya que estamos, a los montes que quedan al oeste:


Entonces emprendí el regreso, también a pie. Desde las escalinatas de la catedral saqué esta foto del pequeñísimo centro comercial que hay allí:


Para los memoriosos, esta foto es del mismo lugar que una de las primeras, desde mitad de la montaña, pero ahora ya durante el atardecer:


Foto a una calle de Vallvidriera, que por cierto tiene una arquitectura muy linda, además de las vistas:


Bueno, de ahí me subí al funicular, luego el tren, luego el metro, y regresé al piso en bastante menos de una hora. Aunque estaba bastante cansado, había llegado una amiga gaditana (de Cádiz) de Mai, mi compañera de piso, y nos fuimos a cenar unas tapas por ahí.

Me acosté temprano, ya que el domingo tenía decidido ir sí o sí a Tarragona...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

que bonitas algunas fotos...la verdad que me encanta el tibidado desde que lo visite

Anónimo dijo...

Hola, por casualidad he entrado en esta pagina y pese a q esta bien escrito y hay fotos muy chulas, me he quedado decepcionada. Si, pq has estado en uno de los mejores sitios de Barcelona y no has sabido valorarlo.

Primero de todo la catedral no es catedral, sino Basilica. La "parte blanca" es el templo y la "parte marrón" es la cripta.

Este edificio esta construido por Enric Sagnier, quien construyó mas de 500 obras en Barcelona y el Tibidabo es la predilecta.

Es poco el tiempo q tengo para contarte una historia tan bonita como es la historia del Templo del Tibidabo por eso te pido por ti mismo que, si vulves a subir, entra al templo y pide una guia gratuita sobre el templo. Te la daran con mucho gusto y saldras con otra perspectiva de lo que es la cabeza de Barcelona.

Saludos y ánimo con la vida, q nunca viene mal.

Fernando dijo...

Hola,

Antes que nada, quiero comentarte que en la versión más actual de este blog he corregido la afirmación de que el Tibidabo es una catedral. Desde mi ignorancia, suponía que todo templo grande era necesariamente una catedral, al menos mi vida en Argentina me había convencido de esto, ya que no hay más de un "templo grande" por ciudad. Alguien me ha corregido en otro momento, y me ha dicho que Barcelona podrá tener todos los templos grandes que yo quiera, pero sólo una catedral :) Así que mis disculpas por el error.

Me hubiera gustado que comentaras la historia del Tibidabo, para así compartirla con los otros lectores de este blog. En cualquier caso, no faltará ocasión para que yo vuelva (probablemente mostrándole a algún amigo las joyas de la ciudad) y pida la guía que mencionas.

Saludos!!!

Fernando